El cloud computing personalizado es uno de los servicios que más ha ganado relevancia en los últimos años. A diferencia de hace mucho tiempo, en el que los servicios de internet y muchas herramientas digitales eran estrictamente de empresas líderes, en la actualidad son muchas las compañías que tienen acceso a las mismas. Sin embargo, ahora es mucho mejor, porque se adquieren de manera personalizada.
Si alguna vez has utilizado Google como tu proveedor principal de servicios y herramientas digitales para tu empresa, seguro sabrás lo tedioso que puede llegar a ser. El soporte técnico puede tardar mucho tiempo en responder, la herramienta no ofrece alternativas adaptadas a tu compañía, o simplemente sientes que hay algo que falta para que funcione correctamente. Con un servicio de cloud computing personalizado es totalmente diferente, y a continuación te explicamos por qué.
El cloud computing personalizado es mucho más amigable con tu bolsillo
Esto es un punto muy importante. Siempre van a existir productos, herramientas y servicios mucho más baratos que aquellos que se ofrecen en Google. Y no se debe a que sean de menor calidad, simplemente que una marca tan grande puede permitirse aumentar precios sin perder clientela. Sin embargo, te aseguramos que con el cloud computing personalizado puedes encontrar precios más accesibles por servicios de igual calidad y confiabilidad.
La personalización de los servicios es increíble
No importa que tan flexibles y personalizables los servicios de Google prometan ser. Estos siempre están pensados para ofrecerse de forma masiva a todas las empresas del mundo, por lo que hablar con el proveedor para agregar nuevas herramientas es casi imposible. En cambio, con un servicio de cloud computing personalizado, que suele ser en menores magnitudes, podrás enviar feedback a tu proveedor y obtener soluciones inmediatas para tu empresa.
Se mantiene al día para resolver tus inconvenientes
Ningún software o hardware es perfecto. Los bugs y problemas técnicos siempre van a ocurrir, incluso en servicios como los de Google. Sin embargo, existe una gran diferencia entre estos y los de cloud. Hablamos del tiempo de resolución. Si tu programa presenta un error en específico, tendrás que esperar algo de tiempo hasta que Google lo identifique y decida lanzar una actualización. En cambio, con el cloud computing se ataca el problema directamente con actualizaciones pensadas para ti.
Puedes gestionar tus gastos de manera eficiente
Los servicios de Google, en la mayoría de los casos, solo se pueden usar por suscripción. Esto quiere decir que tendrás que pagar por todas las herramientas, incluso si no las utilizas. Por otro lado, el cloud computing personalizado es un software de ‘pago por uso’. Esto quiere decir que solo costearas aquellas herramientas que utilices. Esto te permite gestionar de manera más eficiente tus gastos, así como también ahorrar algo de dinero.
Todo en un solo lugar
Tener un cloud computing personalizado significa contar con una plataforma y perfiles únicos para acceder a todas tus herramientas. Solo debes tener el escritorio central, y ya tendrás acceso a las demás funciones. Sin embargo, Google es un poco más complicado. Normalmente tienes que acceder a diferentes páginas, aplicaciones y funcionamientos para poder utilizar todas las herramientas que necesitas, entorpeciendo el proceso.
La seguridad de un cloud computing personalizado es muy buena
No pienses que solo por tratarse de Google, la seguridad de sus herramientas será inquebrantable. Lo mismo sucede con los servicios de cloud computing personalizado. Sin embargo, la seguridad de la segunda alternativa puede llegar a ser igual de buena. La única diferencia es que puedes acceder a los mismos privilegios con una mejor inversión y un servicio de mayor calidad.
El cloud computing personalizado ofrece acceso a herramientas únicas
Lo mejor de las empresas proveedoras de servicios de cloud computing personalizado es que siempre están experimentando. Podrás acceder a herramientas que ni siquiera sabias que existían o que necesitabas, ya que estas empresas suelen escuchar de manera más cercana las necesidades de sus clientes y distribuir las soluciones. En cambio, Google es mucho más lento en este aspecto.