El hosting es, hoy en día, uno de los puntos más críticos para una empresa. De él dependerá en buena medida el proceso de digitalización, así como la gestión y, de manera indirecta, la competitividad. Hoy en día, optar por un servidor cloud es decantarse por el sistema de alojamiento web más avanzado.
Frente a otros tipos de hosting, un servidor cloud mejora considerablemente las prestaciones. Por ello, es especialmente recomendable para aquellos usuarios que tengan grandes necesidades, cuando la web genere un tráfico intenso, cuando se manejen grandes cantidades de datos o cuando la empresa tenga previsiones de desarrollo y crecimiento.
Aspectos esenciales de un buen servidor cloud
A pesar de sus ventajas, al elegir un servidor cloud conviene no precipitarse. Una mala decisión puede tener consecuencias serias para la empresa. Cada negocio es diferente, y el alojamiento en la nube debe siempre adaptarse a sus especiales características. A pesar de ello, y sea cual sea el caso, hay una serie de criterios básicos que te ayudarán a acertar en la decisión:
– Proveedor de confianza: es el punto que debe guiar la elección de un servidor cloud. Proveedores hay muchos, pero no todos ofrecen los mismos servicios ni transmiten la misma confianza. Estás poniendo en sus manos el buen funcionamiento de tu empresa, por tanto, conviene que analices este aspecto en detalle.
– Soporte técnico: no es lo habitual, pero las incidencias ocurren, y en ese caso es primordial contar con un apoyo rápido y directo las 24 horas del día los 365 días del año. No solo apoyo técnico, la monitorización y vigilancia permanente es otro criterio esencial.
– Seguridad: en 2020 más de la mitad de las empresas españolas sufrieron algún tipo de ciberataque. En un momento en el que la delincuencia en la red está en auge, la seguridad debe ser siempre prioritaria. Por tanto, el servidor cloud perfecto será aquel que ofrezca firewalls de última generación y copias de seguridad. Pero no solo en la red, también es importante que ofrezca seguridad física en las instalaciones.
– Disponibilidad: aunque cualquier servidor cloud suele garantizar este aspecto, nunca está demás comprobarlo. Si las aplicaciones de tu empresa necesitan una elevada disponibilidad, no contar con ella implicará una bajada importante del rendimiento.
– Adaptación a la normativa: cualquier empresa necesita cumplir con la legislación del país en el que desarrolla su actividad, así como la de su sector específico. En el caso de España, es primordial que empresa y proveedor del servidor cloud cumplan con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD)
– Soluciones a medida: las necesidades de tu empresa pueden ser muy diferentes a las de otra similar. Por eso, el servidor cloud se debe adaptar a ellas. Y debe hacerlo tanto en el momento actual como en el futuro, de modo que lo ideal es elegir un proveedor que ofrezca diferentes planes y que garantice la escalabilidad.
Ventajas de un buen servidor cloud
La elección de un servidor cloud es crítica. El correcto funcionamiento de la empresa depende en parte de que el servicio que presente el alojamiento web sea adecuado. No hay que olvidar que, si el hosting responde a todas las necesidades del negocio, las relaciones con clientes y proveedores serán más fluidas, las operaciones más ágiles y la seguridad estará garantizada.
En tiempos además de teletrabajo, el hecho de que tu empresa cuente con un servidor cloud permitirá ganar en eficiencia y competitividad. Son factores que siempre implican una reducción importante en costes, una cuestión fundamental en la situación económica que se vive hoy en día.
Si tienes cualquier duda sobre el mejor servidor cloud para tu empresa, no dudes en consultarnos. Te ofreceremos el mejor asesoramiento y pondremos a tu alcance la solución que necesitas.